domingo, 31 de julio de 2011

UN SIMPLE JUEGO DE CARTAS.................................

TODA NUESTRA HISTORIA EN UN SIMLE JUEGO DE CARTAS...


            NO ECHAMOS POR CASUALIDAD UN ARCANO DEL TAROT EN LUGAR DE OTRO...


El www.TarotMarsella.com se divide el 22 Arcanos llamados Mayores y 55 Arcanos denominados Menores. Para realizar un trabajo profundo con el Tarot, se utilizará el potencial de las 76 cartas del juego. En lo que a nosotros nos concierne, solamente recurriremos a 26 de entre todas ellas: los 22 Arcanos Mayores y los cuatro Ases (Oros, Copas, Espadas y Bastos) entre los Arcanos Menores. ¿Por qué?. Una observación rápida de las cartas permite determinarlo. Los 22 Arcanos Mayores están compuestos de figuras que hablan directamente a nuestra imaginación, y de esta manera, ponen en acción los mecanismos inconscientes. Por el contrario, los Arcanos Menores son de un acceso complejo para quien no conoce la ciencia de los símbolos, porque son la división, sobre el modo de un juego de cartas ordinarias (del As al Rey pasando por la sota), de 4 símbolos: Oros, Copas, Espadas, Bastos. Si nos hemos quedado con los ases es porque representan, en estado bruto o primitivo, las cuatro etapas de la consciencia:

a)    Sexualidad, sensualidad, despertar de los sentidos, conocimiento del mundo material para los BASTOS;

b)    Terreno emocional, sentimental, receptividad, apertura de consciencia, para las COPAS;

c)    Pasar a la acción, ruptura del cordón umbilical, descubrimiento y utilización de la propia violencia de uno mismo ( non necesariamente negativa, porque lo que quiere decir violencia significa igualmente intensidad) para las ESPADAS;

d)    Por último el terreno de lo espiritual y de la mental para los OROS... pero también del dinero, que no olvidemos que solamente tiene el valor por el cual nosotros lo estimamos.

Se conocen muy pocas cosas sobre los orígenes del Tarot y absolutamente nada sobre su creador, razón por la que no le daremos la tabarra con este tema. Lo esencial es este objeto extraordinario, este instrumento de conocimiento de uno mismo que la historia nos ha legado.

El Tarot de Marsella no nos embarca en quimeras alegóricas. Nos cuenta sencillamente la historia de nuestra vida. De la VIDA. Para comprender su sentido, es inútil que se sumerja en montones de obras esotéricas. Basta con mirar, incluso (y sobre todo) aunque esa observación le moleste. No nos gusta o no detestamos por casualidad tal o cual carta. No tiramos por azar un arcano en lugar de otro. Nuestro inconsciente ha elegido el que representaba mejor nuestro estado de ánimo, o la posibilidad de hacer evolucionar una situación.



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